LA GOTA QUE COLMA EL VASO El sacrificio que tuvo que hacer Kate Middleton por culpa de Meghan Markle (y que jamás podrá perdonarle)

La famosa foto de Kate Middleton y Meghan Markle, junto a Guillermo y Harry, paseando juntos tras la muerte de Isabel II fue uno de los momentos más duros de la vida de la princesa de Gales. El motivo: el sacrificio que tuvo que hacer por culpa de la duquesa de Sussex.

Kate Middleton y Meghan Markle pasean de luto junto al príncipe Guillermo y Harry tras la muerte de Isabel II. / getty

Elena Castelló
ELENA CASTELLÓ

El paseo de los príncipes de Gales y de los Duques de Sussex, a las puertas de Windsor, dos días después de la muerte de Isabel II, para agradecer a la gente congregada su paciencia y homenaje a la reina, fue, según fuentes cercanas a Kate Middleton, consultadas por el biógrafo de Carlos III, Robert Jobson, uno de los más difíciles de su vida. La tensión, especialmente con Meghan Markle, era insoportable, aunque la prensa lo tomó como un posible síntoma de reconciliación.

Varios medios británicos se han hecho ahora eco de las afirmaciones de de este veterano periodista, buen conocedor de los entresijos de palacio, que dejan claro que aquel paseo de los dos hermanos con sus esposas fue algo parecido a una tortura. La supuesta reconciliación fue solo «una ilusión».

¿Por qué estaba tan tensa Kate Middleton? ¿Había ocurrido algo entre bambalinas que había agudizado la ya de por sí pésima relación con sus cuñados? Jobson da la clave y explica por qué Kate tenía una nueva razón de peso para querer evitar cualquier contacto con los Sussex.

La verdadera razón por la que Kate y Meghan nunca se reconciliarán

La princesa de Gales no pudo acudir a la cabecera de Isabel II, en Balmoral, el 8 de septiembre de 2022, para despedirse de ella y tuvo que quedarse en Windsor con sus hijos, según explica Robert Jobson, autor de «Nuestro rey», una de las últimas biografías del monarca.

En declaraciones a la prensa australiana, Jobson explica que el resentimiento de Kate hacia Meghan se disparó cuando se vio obligada a permanecer lejos de Escocia sin poder despedirse de la reina Isabel, como el resto de miembros «senior» de la familia, para no desairar a Meghan, que permanecía en Frogmore Cottage.

Kate Middleton y Meghan Markle, junto sus maridos, en la despedida de Isabel II.

Kate tuvo que quedarse en Adelaide Cottage y fue vista cuando salía de Windsor, supuestamente para recoger a los niños del colegio en su primer día de clase, mientras la familia más cercana, los hijos y nietos de Isabel, se congregaban en Balmoral para su último adiós, entre ellos la condesa de Wessex, esposa de Eduardo.

Enrique insistió en varias ocasiones para que Meghan viajara con él a Escocia, pero el rey alegó que Kate tampoco iba a estar presente. La decisión de que Kate no acudiera a Balmoral, algo que causó extrañeza, se tomó para que Enrique no pudiera tener ninguna excusa para reclamar que Meghan estuviera en esos momentos junto a la reina. La realidad era que la familia no quería a Meghan cerca en un momento tan íntimo.

El resentimiento de Kate Middleton, una cuestión de lealtad a la corona

Carlos aseguró que solo estuvieron los hijos y los nietos de la reina, pero no los esposos y esposas, a pesar de que Sophie Wessex sí estaba allí. La realidad era que Meghan no era bienvenida, pero Carlos no se lo podía decir abiertamente a Enrique, por lo que le pidió a Kate personalmente ese último sacrificio, confiando en su total lealtad, para que la familia quedara bien con Meghan.

La realidad es que Kate no pudo despedirse de la reina, algo que obviamente era muy importante para ella. El resentimiento de Kate con Meghan se disparó y, dados los acontecimientos que han tenido lugar después, no parece probable que se haya mitigado, a pesar de que llegaron juntas al funeral de Isabel II, por cuestiones de protocolo.

Meghan Markle y Kate Middleton en el funeral de la reina Isabel II.

Quizá esta revelación aclara también el por qué de la ausencia de Meghan en la Coronación de Carlos III. Enrique es hijo del rey y, a pesar de sus equivocaciones, siempre será parte de la familia. Pero Meghan es un «factor externo» a ella y, como vamos descubriendo poco a poco, una fuente de tensión muy real. Lo que Carlos puede personarle a su hijo no es probable que se lo pueda perdonar a su nuera.

21 de marzo-19 de abril

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