Letizia en los Premios Nacionales de Innovación y Diseño: «Cada vez que me meto a leer algo de inteligencia artificial, aparece una nueva»

Al terminar la entrega de los Premios Nacionales de Innovación y Diseño, la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, quiso reconocer el papel de la reina Letizia en una doble vertiente: como una mujer «que ha inspirado a muchas generaciones de niñas y mujeres como yo misma» y como símbolo de «una España con mujeres con poder que ayuda a otras mujeres para poder tenerlo». Minutos antes, la Reina ya había mostrado cómo se logra ese tipo de relevancia en una sociedad como la nuestra. En pocas palabras: no mirándose el ombligo.

Se notó, y mucho, que a la reina Letizia le gustaron y hasta impresionaron los ganadores de estos Premios Nacionales de Innovación y Diseño, pues asistimos a uno de los mejores discursos que ha dado en estos últimos meses. No tanto por su contenido, pues este siempre suele estar milimétricamente medido para hablar en los mejores términos de los homenajeados en cada ocasión, sino por algunas frases sueltas que suelen mostrar la particular sensibilidad de la Reina.

TAMBIÉN TE INTERESA

El potente discurso de la reina Letizia y el significado de su frase más profunda: «¿Vamos al trabajo a sobrevivir?»

El primer duelo de estilo de Marta Carazo y Rosa Lerchundi, las dos mujeres fuertes en el equipo de la reina Letizia en Zarzuela

Repitámoslo: nada transparente más una sincera intención de contribuir que apartar la mirada de uno mismo y atender a lo que a uno le rodea. Es lo que suele hacer la reina Letizia en cada discurso y aparición de agenda oficial y lo que volvió a hacer en los Premios Nacionales de Innovación y Diseño.

Ese gesto de la voluntad tan patente en la reina Letizia, puede a veces hacerse más desde la estrategia o el cálculo que desde la sinceridad. Sin embargo, en el caso de Letizia transparenta una capacidad muy real para conectar con lo que sentimos y pensamos la mayoría de la sociedad. Y así elevarlo a las tribunas que solo puede pisar una Reina.

En su discurso dedicado a la innovación, la reina Letizia no pudo dejar de subrayar su desconcierto, que es el de todos nosotros, ante la rapidez de la evolución de la inteligencia artificial y el bombardeo de anuncios acerca de sus ventajas e inconvenientes, que tanto atemorizan ahora mismo a gran parte de la sociedad por su inevitable impacto en el empleo. La Reina lo formuló de la siguiente manera:

«La excepcionalidad aquí reunida nos hace pensar que la inteligencia humana es irremplazable», comenzó su discurso de la reina Letizia. «Y eso que la inteligencia artificial, ya lo sabemos, es una gran herramienta en desarrollo que va a ser excepcional. Que bien utilizada puede ser muy útil y que, por cierto, cada vez que me meto a leer algo sobre inteligencia artificial ha aparecido una nueva».

«Está la súper inteligencia, la débil o la estrecha, la general y ahora está la multimodal, la cuántica, la autoconsciente, la reactiva… en fin», fue enumerando la reina Letizia en la parte más personal de su discurso, recogiendo el desconcierto que tenemos tantos de nosotros ante este desarrollo de la tecnología.

«Pero cómo son esas conexiones sinápticas tan humanas, sobre todo las vuestras [señaló a los premiados] y qué significado tiene que esas conexiones nos permitan aprender, pensar, actuar, recordar y sentir», terminó su argumentación Letizia, queriendo subrayar con la inflexión de su voz sobre todo la palabra 'sentir'.

Fue la nota personal en un discurso en el que insistió en señalar a los premiados por sus innovaciones y avances en el diseño como «una cartografía de la excelencia» y que forman parte de «una España que es muchas cosas, de todo tipo, pero que también sois vosotros, mujeres y hombres con obras, trayectorias e inteligencias únicas que habéis merecido que vuestro país os reconozca».

TAMBIÉN TE INTERESA

La reina Letizia ha dicho alto y claro lo que le preocupa de verdad: «Gracias por enseñarnos este trocito de alma tan bonita que tenéis»

El viaje exprés de Letizia a Roma: por qué vuelve a Italia esta semana por tercera vez en un año