Un romance muy real
Un romance muy real
A lo largo de los años, el selecto y glamuroso club que forman las estrellas de Hollywood se ha cruzado con el aún pequeño círculo de la realeza en más ocasiones de las que recordamos. La combinación de celebrities con los royal ha dado lugar a matrimonios de leyenda (Harry y Meghan Markle o Grace Kelly y Rainiero de Mónaco) y a algunas curiosas y breves aventuras como la de Rob Lowe con la princesa Estefanía o la que atribuyen al príncipe Felipe con Gwyneth Paltrow.
Aquel amor de verano nunca confirmado oficialmente entre el futuro rey de España y la actriz ganadora de un Oscar por Shakespeare in love se produjo en Mallorca en 2002. El príncipe de Asturias pasaba allí las habituales vacaciones estivales junto a su familia y Gwyneth había llegado a la isla invitada por su amiga Rosario Nadal. En aquel momento esta todavía estaba casada con Kiryl de Bulgaria, primo de Felipe con el que pasó muchos veranos en Marivent.
Por aquel entonces, el hijo del rey Juan Carlos ya había tenido su primera novia oficial, Isabel Sartorius, con la que estuvo saliendo dos años. Durante su aventura americana, Felipe conoció a Gigi Howard, y a finales de 2021 anunció la ruptura con la exmodelo y estudiante de publicidad noruega Eva Sannum. Por su parte, la estrella de Hollywood, enamorada de España desde su estancia de juventud en Talavera de la Reina, había sido relacionada con compañeros de profesión como Brad Pitt o Ben Affleck.
Los ecos de aquella supuesta historia de amor con el mar Mediterráneo como telón de fondo, se hicieron tan sonoros que llegaron incluso al diario australiano Sydney Herald, que publicaba: «Una cena no hace a una princesa, pero se rumorea que Gwyneth Paltrow se está acercando mucho al príncipe heredero Felipe de España. Después de que la actriz hablara muy bien de los españoles y tachara a los británicos de aburridos, la cita ha sido confirmada por la casa real».
En efecto, la existencia de aquel encuentro a finales de agosto en Sa Cranca, una popular arrocería de Palma, se confirmaba de forma oficial. Pero no se trató de una cena íntima en pareja. Según aclararon fuentes de Palacio al diario El Mundo, en aquella concurrida mesa también estuvieron presentes el líder de Coldplay, Chris Martin, las infantas Cristina y Elena, Jaime de Marichalar y Rosario Nadal.
Más detalles apuntaba incluso el Daily Mirror, que se aventuraba a asegurar que la actriz había volado previamente desde el Festival de Cine de Venecia para disfrutar de una romántica velada con el príncipe en Madrid. A estos dos encuentros habría que sumar otras dos citas más en un lujoso yate, siempre según el sensacionalista periódico británico.
Añadiendo picante por su parte, el diario español, que titulaba su crónica de lo ocurrido en Mallorca con un sonoro «a Felipe le gustan rubias», publicaba citando a una fuente anónima que Gwyneth Paltrow estaba «loca por Felipe», justificando esta pasión veraniega porque «es guapo y rico, el tipo de persona de la que se podría enamorar».
¿Y qué pasó después? Pues que aquella romántica burbuja explotó apenas formada. «Gwyneth es una tía muy lista con la cabeza muy bien amueblada. Le gustaba Felipe, sí, pero cuando vio la que se le podía venir encima no lo dudó un momento. Salió por patas, como se suele decir», publicó la revista Vanity Fair citando a una persona cercana al entorno del príncipe.
No tardaría el royal en reponerse de aquel misterioso episodio. En otoño de ese año cruzó miradas por primera vez con Letizia Ortiz, una periodista asturiana. Y el 1 de noviembre de 2003, la casa real anunciaba el compromiso de la pareja.
Tampoco le costó mucho a Gwyneth Paltrow volver al ruedo amoroso. En octubre de 2002, la actriz comenzó a salir con el músico Chris Martin. Sí, el mismo que estaba ese verano en la arrocería mallorquina. Al año siguiente se casaron en una boda secreta sin invitados en un hotel de Santa Bárbara y tuvieron dos hijos antes de separarse en 2014. Actualmente, la intérprete y empresaria está casada con el productor Brad Falchuk.