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Sofía Palazuelo, tras los pasos de Marta Ortega: así va a modernizar la Casa de Alba la duquesa de Huéscar

Son tiempos de múltiples sorpresas desde la Casa de Alba, pero nos quedamos con la discreta irrupción de Sofía Palazuelo como embajadora del primer perfume con sello Fitz-James Stuart.

Sofía Palazuelo ha abierto su perfil de Instagram coincidiendo con el lanzamiento del perfume Fitz-James Stuart. INSTAGRAM (@SOFIA.PALAZUELO)

No se puede decir que los aristócratas españoles gusten demasiado de salir en las portadas, pero de todas las estirpes nobles, la de los Alba pudo ser la más friendly con la crónica social, gracias a la seductora y divertida personalidad de Cayetana Fitz-James Stuart, la duquesa más añorada, y su hija, Eugenia. Más allá, poca cosa. Los hijos del actual duque de Alba y sus respectivas esposas han preferido siempre el ocultamiento. Hasta ahora.

Tras muchos años en un discreto cuarto plano, con apariciones muy contadas en la Semana Santa, la Feria de Sevilla y poco más, los duques de Huéscar dan un paso adelante y consienten en convertirse en la cara visible de la Casa de Alba, un título y una marca muy necesitada de relevancia en el ámbito que más importa ahora: el simbólico. Lo hacen los dos, Fernando Fitz-James Stuart y Solís y la elegantísima Sofía Palazuelo, pero como sabemos los habituales de este ámbito, son ellas las imprescindibles allí donde se juegan los deseos, aspiraciones y ensueños.

La salida a la relevancia de los medios de los futuros duques de Alba se produjo hace unos días en la portada de la revista Vogue, donde él posó incomprensiblemente circunspecto y con la duquesa Sofía Palazuelo colocada en una sutil posición. Todo subrayaba el protagonismo de Fernando Fitz-James Stuart, quizá como depositario del legado simbólico que utiliza como reclamo su emprendimiento. Un lanzamiento que supone toda una actualización para la Casa de Alba, que en breve lanza su primer perfume: Fitz-James Stuart.

Difícil, muy difícil que un perfume se vuelva atractivo a las compradoras con la comparecencia de un duque de Huéscar que ha heredado el gesto adusto de su padre y de su abuelo. Un rostro duro fantástico para las altas finanzas, las negociaciones políticas o las campañas militares, pero con menos sintonía para seducir a quienes sueñen con perfumarse aristocráticamente. En el mercado de lo estético son ellas las que invitan, con su elegancia y belleza, a soñar. Y ahí es donde entra la duquesa.

En el estupendo perfil de Instagram de Sofía Palazuelo aún cuelgan pocas fotos, pero todas exudan esa elegancia retro que hoy tanto conquista. INSTAGRAM (@SOFIA.PALAZUELO)

Si este anunciadísimo emprendimiento de los Alba pretende triunfar, tiene que tener claro que su cara visible ha de ser la de Sofía Palazuelo, duquesa de Huéscar y próxima duquesa de Alba. No parece así al contemplar la primera aparición estelar de la pareja en una revista, pero sí en los primeros pasos que ya están dando para calentar el lanzamiento de su perfume. Además de abrir una cuenta en Instagram del mismo, Sofía le ha quitado el candado a su perfil personal y ha compartido algunas (preciosas) fotos. ¿Cómo comprar bajo la advocación de una duquesa si apenas la conocemos de nada?

La marca Casa de Alba necesita una cara femenina

Estos mínimos movimientos en el sentido que impone el mercado de la cosmética invitan a pensar que los Alba han hecho alguna autocrítica después del fracaso de su anterior intento de monetizar el legado familiar. Nos referimos a Alba Fine Food, la marca de productos gourmet que fundó Cayetano Martínez de Irujo, duque de Aliaga, y que retomó su sobrino, Fernando Fitz-James Stuart y Solís en 2020, para intentar reflotarlo sin éxito. Hoy se necesita mucha visibilidad para afianzar una marca y sin embajadora, musa o influencer es bastante complicado hacerlo.

Un ejemplo demoledor: hasta Inditex ha tenido que echar mano de Marta Ortega para ofrecer al público una persona de carne y hueso en la que pueda encarnarse Zara. Sin procesos de identificación es hoy difícil que un branding tenga éxito. En este sentido, la hija de Amancio Ortega y Sofía Palazuelo están conectadas, como cuerpos que le insuflan vida a sendas marcas familiares. Eso sí: una actúa como imperio textil global y la otra ha de salir, aún, al ruedo del mercado.

Una de las imágenes de vacaciones más divertidas de Sofía Palazuelo en su perfil de Instagram. INSTAGRAM (@SOFIA.PALAZUELO)

Hay algo más que conecta a estas dos mujeres, ambas francamente misteriosas y las dos protagonistas recientes al conceder sendas entrevistas de manera muy excepcional, cosa que, de nuevo, vuelve a demostrar la imperiosa necesidad de las compañías que se dedican a satisfacer nuestros deseos de belleza de dotarse de una interfaz femenina.

Lo leímos claramente en las explicaciones sobre su papel en Zara que Marta Ortega dio a EPS con motivo del 50 aniversario de Inditex: la heredera de Amancio necesitaba contar mejor cuál es su papel en el organigrama ejecutivo de la empresa para que se entendiera mejor.

Marta Ortega ejerce de encarnación de Zara

Porque no se entendía en qué consistía el cargo de presidenta no ejecutiva de Marta Ortega, con su constante presencia en la crónica social y viral como embajadora de la ropa de Zara.

Ahora conocemos que Marta Ortega es el control de calidad creativo de todas las colecciones de Zara. Y el cerebro de la comunicación de la marca. ¿Cuál es el papel de Sofía Palazuelo en la creciente conversión en marca de la Casa de Alba? Si solo se ofrece como gancho inspiracional, su figura puede padecer el mismo vaciamiento que la de la presidenta de Zara.