NO TE PIERDAS

La reina Letizia rescata su traje gris de cuadros más elegante de Hugo Boss para la reunión con la Fundación Princesa de Girona

las estrenó en 2017

La reina Letizia renuncia al privilegio de la peineta de la reinas españolas, pero se deja puestas sus gafas de sol favoritas de Hugo Boss

La reina Letizia se ha protegido del sol durante el funeral del pontífice con este accesorio repetido de color negro. ¿Es un error de protocolo? Mucha gente se lo pregunta.

El rey Felipe VI y la reina Letizia con gafas de sol. getty

Al igual que el resto de asistentas al funeral del papa Francisco, la reina Letizia ha cumplido a raja tabla el protocolo impuesto por el vaticano para despedir al pontífice. La institución tiene impuesta una etiqueta en la que se exige, además del negro, vestido y manga larga, mantilla y joyas discretas. Sin embargo, doña Letizia ha saltado ligeramente la norma añadiendo un accesorio que no estaba contemplado, pero que era casi necesario: las gafas de sol.

Prescindiendo de la peineta y luciendo su broche del joyero de pasar, la reina consorte ha acudido al funeral con este complemento al que muchos otros también han recurrido. La despedida del pontífice ha estado acompañada de un muy soleado día y han sido varios los invitados, incluido el rey Felipe, los que han recurrido a unas gafas de sol. Y el modelo elegido por la reina ya está en nuestro radar.

¿Un error de protocolo de la reina Letizia?

Al ver a al rey Felipe VI y a la reina Letizia luciendo ambos gafas de sol en el funeral por el papa Francisco ha surgido la duda sobre un supuesto error de protocolo. En realidad, el protocolo de la Casa Real española no dice absolutamente nada al respecto del uso de gafas de sol. Sí es cierto, sin embargo, que no se considera adecuado ponérselas en interior en el una iglesia durante el transcurso de una misa. Pero sí los es llevarlas cuando el oficio tiene lugar en exterior, sobre todo, si se usan por un problema médico o por la necesidad de proteger los ojos de los dañinos efectos de los rayos solares.

Es por ello que en el bolso de Carolina Herrera de color negro y asa corta con el que completó el look, la reina Letizia llevaba unas gafas de sol guardadas. Un accesorio que usó únicamente durante la misa, no en su llegada ni tras haber finalizado, y que utilizó para protegerse del sol directo que había durante la ceremonia religiosa.

La reina Letizia lleva unas gafas de sol de Hugo Boss repetidas. getty

El modelo elegido era uno XL, de pasta negra, de forma redondeada y con detalles de color blanco en la montura. Unas gafas aptas para el luto que requería la ocasión y que no es la primavera vez que vemos. Y es que, se trata de un diseño repetido, que está entre sus favoritos y que estrenó en el verano de 2017.

Son unas gafas de sol de Hugo Boss que llevó por primera vez en su primera visita de Estado a Reino Unido. Hace casi diez años, viajó a Londres junto a Felipe VI y fue allí cuando estrenó este complemento que, en su momento, se vendía por 165 euros y que estaba disponible en otros colores. Ahora, la reina consorte las ha recuperado para esta ocasión demostrando la atemporalidad y, sobre todo, estilo.

Por qué la reina Letizia no ha llevado peineta en el funeral

Las gafas de sol han sido una elección doña Letizia, al igual que ha ocurrido con la peineta, que ha optado por no llevarla. También llamada «teja», este complemento no forma parte del protocolo vaticano, pero sí es un privilegio histórico no obligatorio que tienen las reinas y damas españolas. Seguramente por discreción y sencillez, la reina consorte ha elegido prescindir de ella y la ha cambiado por una diadema fina, un accesorio que está ahora entre sus favoritos y le hemos visto en varias ocasiones en los últimos meses.

Y es que, la mantilla, elemento tradicional de la vestimenta del luto de nuestro país, se puede sustituir por un tocado, complemento que han elegido otras asistentes. Doña Letizia ha escogido esta opción que quedaba casi invisible son su melena suelta, a diferencia de la reina Sofía, quien ha sido reconocida por su uso constante de la peineta en el Vaticano en varias ocasiones.