El vestido satinado de Oysho en dos colores que no descartamos para looks de invitada de bautizos y comuniones

Para looks de invitada con sandalias de tacón o para ir a la oficina en zapatillas.

Pincha en la imagen para descubrri los vestidos de flores más bonitos, la otra gran tendencia de la primavera.

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Pincha en la imagen para descubrri los vestidos de flores más bonitos, la otra gran tendencia de la primavera. getty
Sonia Gómez
Sonia Gómez

Sí, todas tenemos esa amiga/conocida que te confirma que el vestido que lleva presente (uno muy elegante y precioso pero que ha sabido combinar a la perfección para un día de diario cualquiera) ya lo llevó específicamente para la boda de su mejor amiga. Y eso solo se puede conseguir con esas siluetas perfectamente equilibradas entre toques de invitada y otros detalles casual.

Exactamente lo que ocurre con este precioso vestido satinado de Oysho que no descartamos para cubrir la temporada alta de bautizos y comuniones y que unimos a otras compras versátiles, ponibles y muy prácticas, como este traje de cuadros vichy o esta blusa romántica de Zara que combina con absolutamente todo y que ya está prácticamente agotada.

Pero volviendo a lo que nos interesa, nuestro vestido predilecto está disponible en dos colores, uno en verde agua y otro en color uva rosada, su diseño fluido lleva manga corta holgada, escote pico cruzado, cintura elástica que se adapta a la figura para estilizar, falda midi con vuelo y cierre mediante lazada debajo del pecho. Una opción muy fresquita y cómoda para estrenar ya mismo con chaqueta y para sacar partido el resto del verano en sandalias.

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Ambos tonos están disponibles desde la talla XS a la L por 35,99 en la web de la firma y en tiendas físicas. No lo dejes escapar... ¡o te arrepentirás para siempre!

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HORÓSCOPO

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Sagitario

Como signo de Fuego, los Sagitario son honestos, optimistas, ingeniosos, independientes y muy avetureros. Disfrutan al máximo de los viajes y de la vida al aire libre. Son deportistas por naturaleza y no les falla nunca la energía. Aunque a veces llevan su autonomía demasiado lejos y acaban resultando incosistentes, incrontrolables y un poco egoístas.