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Semana 38 de embarazo: contracciones

En esta semana de embarazo es muy importante saber distinguir entre dos tipos de contracciones de cara al parto.

Pincha en la imagen para descubrir los mejores alimentos que puedes tomar durante el embarazo./pixabay

Pincha en la imagen para descubrir los mejores alimentos que puedes tomar durante el embarazo. / pixabay

Joaquina Dueñas
JOAQUINA DUEÑAS

En la semana 38 de embarazo el bebé ya es capaz de vivir en el exterior del útero materno ya que todos sus órganos están completamente preparados. Sin embargo, algunos de ellos seguirán desarrollándose después del nacimiento, como el sistema nervioso. Su talla está alrededor de los 48-50 centímetros y puede pesar entre 3 y 3,2 kilos. La capa de grasa protectora que recubre su cuerpo comienza a deshacerse y la piel del bebé puede sentir de manera más clara el líquido que lo rodea.

Ya e stá preparado para nacer y es importante distinguir las contracciones de parto de las de Braxton Hicks, preparatorias. Éstas últimas suelen ser más suaves, irregulares y aunque pueden durar varios minutos, terminan parándose. Es importante tener paciencia y mantener la calma evitar visitas innecesarias al hospital. Ten en cuenta que sólo el cinco por ciento de los bebés nacen en la fecha prevista de parto, si bien, más del 25 por ciento lo hacen en la semana 40.

Según el último estudio publicado en la revista Human Reproduction sobre ‘La duración del embarazo humano y los factores que influyen en su variación natural’, “las fechas de parto entre gestaciones naturales pueden variar hasta en 31 días”. Es por tanto un buen momento para aprender a escuchar a tu cuerpo y a tu bebé.

Uno de los signos que determinan que el parto está cerca es la expulsión del tapón mucoso. Se trata de una secreción gelatinosa que sirve de barrera entre el útero y la vagina. Se expulsa manchado de sangre y tiene lugar cuando comienza a dilatarse el cuello uterino. Cuando el bebé empieza a presionar con la cabeza se dilata el cuello del útero y el tapón mucoso se expulsa. A partir de ese momento, el parto puede empezar ese mismo día o transcurrida otra semana, si bien lo habitual es que no pasen más de dos o tres días.

El cuerpo de la madre tiene ya pocos cambios en estas últimas semanas de embarazo, aunque los días se le hacen cada vez más largos y puede sentirse más y más cansada. El peso de la barriga y la presión hace que sea difícil dormir estos últimos días. Utiliza un cojín o un almohadón para colocar entre tus piernas y aliviar la presión al tumbarte de lado. Procura caminar todos los días para activar la circulación y favorecer el retorno sanguíneo y, siempre que puedas, pon las piernas en alto sobre un escabel o sobre una silla.

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