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De Gipuzkoa a las Hurdes, seis escapadas muy naturales

Para empezar el otoño, nada mejor que recargar las pilas paseando por espacios casi vírgenes o mimándote a ti misma.

Flysch de la playa de Sakoneta. Gipuzkoa. Haz clic en la imagen y descubre los mejores viajes en tren por Europa/D.R.

Flysch de la playa de Sakoneta. Gipuzkoa. Haz clic en la imagen y descubre los mejores viajes en tren por Europa / D.R.

MARÍA BARBERÁ

Para empezar el otoño, nada mejor que recargar las pilas paseando por espacios casi vírgenes o mimándote a ti misma.

Ordesa y monte perdido: El esplendor del otoño (Huesca)

Cascada de Añisclo y paseo entre las hayas / D.R.

Otoño es una estación única en Ordesa y Monte Perdido. Rojos, ocres y amarillos pintan de color los bosques que cubren las más de 15.000 hectáreas de este parque nacional, que celebra este año su centenario. Situado en la comarca del Sobrarbe, en el Pirineo de Huesca, está coronado por el Monte Perdido (3.355 m) y se extiende por cuatro valles: Añisclo, Escuaín, Ordesa y Pineta. Hayas, fresnos, abedules, abetos y pinos se cubren de color durante estos meses, antes de que las primeras nieves cubran este espacio, que es también Reserva de la Biosfera y patrimonio de la Unesco. Y para celebrar su primer siglo, en octubre tienes rutas especiales guiadas para descubrirlo. Uno de los itinerarios más espectaculares es el de las cascadas, que parte desde la pradera de Ordesa y llega a la cascada de la Cola de Caballo (1.887 m), por los senderos del río Arazas, la cascada de la Cueva, la de Soaso y su circo (1.823 m), desde el que se puede ver el Monte Perdido. Una caminata de 16 km (4,30 horas), para disfrutar de la naturaleza y ver especies protegidas como el águila real o el quebrantahuesos. Si no te atreves, hay rutas más cortas y espectaculares.

DÓNDE DORMIR: Hotel Abetos, en Torla, a 1 km de la entrada. Desde 130 €.

Gipuzkoa en bicicleta por la costa (País Vasco)

Flysch de la playa de Sakoneta / D.R.

Pueblos pesqueros, acantilados, suaves colinas.... y el mar como telón de fondo. Así es el paisaje de la costa guipuzcoana, que se puede descubrir pedaleando (o en bicicleta eléctrica, para los más cómodos). Saliendo de San Sebastián en dirección oeste, podrás ver los viñedos donde se cultivan las uvas con las que se elabora el txacoli (y probarlo luego en Getaria); llegar a Zarautz (con su magnífica playa); atisbar los acantilados de Zumaia y las espectaculares formaciones rocosas del Geoparque de la Costa Vasca (sí, las de Juego de tronos); y llegar a Mutriku. Hacia el este, la ruta transita por la bahía de Pasaia, antes de subir el monte Jaizkibel y bajar a Hondarribia a por unos pintxos. La ruta este recorre 34,7 km (2,30 h) y la oeste, 21,8 km (2 h). Kili alquila bicis y organiza rutas guiadas o a la carta.

DÓNDE DORMIR. Mercure San Sebastián Monte Igueldo. Con vistas a la ciudad y de la costa hasta Biarritz. Desde 198 €.

Parque de la Serralada: Operación Eco-relax (Barcelona)

Vista exterior de Mas de Salagros / D.R.

¿Eres de los que se preguntan dónde han quedado sus vacaciones? Si es así, un fin de semana dedicado al bienestar puede ayudarte a afrontar la nueva estación con energía. A 30 minutos de Barcelona, en el parque natural de la Serralada del Litoral, está Mas de Salagros, una masía del siglo XV reconvertida en resort 100% eco, con huerto, cocina ecológica y un spa único, el Aire Ancient Baths Vallromanes. Allí, a la luz de las velas, puedes probar sus rituales: el de sales rosas del Himalaya, para revitalizar y purificar; el Athlete, si tu punto débil son los músculos y articulaciones; o The Vegan Expierence, un recorrido por los baños termales, con masaje exfoliante de hierbas; masaje hidratante con aceites esenciales de palo santo y mirra; y, a modo de guinda, un masaje cráneo-facial, con emulsión de algodón de Arabia, granada, raíz de cúrcuma y centella asiática. Y tras el relax, cultiva el espíritu slow con paseos para disfrutar del entorno.

DÓNDE DORMIR. Mas de Salagros. Desde 150 €.

Formentera: Buceo para proteger la posidonia (Baleares)

La playa Calo des Mort, rica en posidonia / D.R.

¿Echas de menos la playa y quieres proteger la naturaleza? Pues octubre es perfecto para descubrir uno de nuestros más valiosos ecosistemas: las praderas de posidonia de Formentera, las más grandes del Mediterráneo. Declaradas Patrimonio de la Humanidad, esta planta marina mantiene las aguas cristalinas, pero está en peligro por la pesca y el fondeo de yates. En octubre, el agua está a 23 ºC, así que puedes descubrirlas haciendo un curso de submarinismo, fotografía acuática o snorkel, como los de Formentera Divers. Y para ayudar a protegerlas, únete al Save Posidonia Project, apadrinando un metro cuadrado de pradera. ¿Y fuera del agua? Disfruta del color de sus salinas, los atardeceres en Cala Saona, los flamencos del Estany de Peix y Pudent, y el aroma a sabina e higuera de sus campos.

DÓNDE DORMIR. Hotel Es Mares, en San Francesc, desde 210 €. Hotel Casbah Formentera, desde 80 €.

Ribeira sacra: Románico y buen vino (Galicia)

Vendimia en las laderas del Sil / D.R.

En las orillas del río Sil, entre el sur de Lugo y el noreste de Orense, se realiza cada otoño una de las vendimias más impactantes del mundo: la llaman "heroica", porque continúa haciéndose de manera manual, en terrenos que tienen hasta un 85% de inclinación. En estas tierras, donde los romanos comenzaron a cultivar la vid, se crían uvas de las variedades mencía, godello y albariño. ¿El plan? Conocer bodegas como Ponte Da Boga, en Castro Caldeas, para descubrir los secretos de este cultivo y probar sus buenos vinos. Pero hay más: cálzate unas botas para pasear por los bosques de castaños y robles donde se esconden una veintena de monasterios románicos (San Pedro de Rocas, Santa Cristina, Xunqueira de Espadanedo...); y asómate a los miradores de Cividade y Soutochao. ¿Otro punto de vista? El que tendrás desde el agua, con un paseo en barco por los meandros del Sil, desde Doade.

DÓNDE DORMIR. El Parador Monasterio Santo Estevo de Ribas de Sil, con claustros románico, gótico y renacentista. Desde 100 €.

Las hurdes: Yoga en la naturaleza (Extremadura)

Meandro del río Malvellido / D.R.

¿Eres fan del yoga o de las técnicas orientales? El paisaje agreste de las Hurdes, al norte de Cáceres, te animará a desconectar del estrés y equilibrar tu cuerpo y tu mente. Sus valles con arroyos y manantiales, sus aldeas con casas de piedra y tejados de pizarra y su vegetación de pinos, olivos, cerezos y jaras pueden convertirse en el marco perfecto para practicar yoga, aeroyoga, reiki, mindfulness, pilates, aeropilates, rebirthing y otras disciplinas orientales. Todas ellas las encuentras en Akassa, un alojamiento bioclimático y ecológico, que recrea la arquitectura tradicional de la zona y está situado en plena naturaleza, en Poblado de Mesegal (Pinofranqueado). Allí, nada más entrar, te piden que te descalces para que sientas la energía de la Tierra. Entre actividad y actividad, puedes hacer rutas para ver las colmenas de autor de miel de castaño y tomillo de Ovejuela o las almazaras ecológicas de Aceitunilla; observar las colonias de buitres negros y leonados; visitar los pueblos de la comarca; y por la noche asombrarte ante un deslumbrante cielo estrellado (sin contaminación lumínica, por supuesto).

DÓNDE DORMIR. Akassa es un alojamiento rural que recrea la arquitectura tradicional de los chozos típicos de las Hurdes, en cuatro amplios lofts con capacidad para cuatro personas, desde 40 € por persona.

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