Té de boldo: el remedio natural que necesitas para conseguir un vientre plano

Internet está lleno de trucos para acabar con las tripas hinchadas po los gases y eso es por único motivo: que mantener un vientre plano no es sencillo. Por muchos abdominales que hagas el ciclo menstrual, incluir en tu dieta a menudo los alimentos que producen más gases o incluso una mala higiene postural pueden acabar creando una “pancita” muy poco favorecedora. Pero desde el continente americano llega una solución con forma de infusión: el té de boldo (Peamus boldus) capaz de combatir los problemas digestivos, echarle una mano al hígado para eliminar toxinas y, lo mejor, ayudarnos a recuperar nuestro vientre plano esos días que no sabemos de dónde ha venido esa tripa hinchada. ¿Quieres saber cómo funciona?

El té de boldo se hace con las hojas secas de un arbusto de hoja perenne que es originario de Chile (lo que explica que en muchas de sus presentaciones comerciales esté mezclado con hierba mate).

En análisis de laboratorio este tipo de té ha mostrado que posee una gran cantidad de sustancias antioxidantes. Sus principales principios activos son alcaloides (como la boldina que tiene efecto diurético), flavonoides y taninos. Y los efectos benefciosos que más se han comprobado en laboratorio son, sobre todo, digestivos. El té de boldo ayuda al buen funcionamiento del hígado y a la vesícula biliar además de tener un ligero efecto laxante y ser una ayuda eficaz contra los gases. En resumen: entre que contribuye a la eliminación de toxinas, le echa una mano al intestino y previene la acumulación de gases, el té de boldo es el aliado perfecto para combatir la tripa hinchada en momentos puntuales.

El té de boldo no es para todo el mundo y pasarse de la dosis recomendada puede tener consecuencias negativas para la salud. Para que nos hagamos una idea, no se recomienda tomarlo a diario porque puede perjudicar a la salud hepática (de hecho, está contraindicado su uso en personas con enfermedades en el hígado o la vesícula biliar) y además, algunos de sus principios activos pueden interferir con el correcto funcionamiento de la medicación de los enfermos crónicos. Así se ha comprobado con múltiples fármacos anticoagulantes y en la medicación contra algunas enfermedades cardíacas.

Dado estos efectos secundarios los expertos recomiendan usar té de boldo en ocasiones puntuales, nunca como una infusión que se pueda incluir a diario en la dieta, y siempre respetando las indicaciones del fabricante. En ningún caso habría que exceder la dosis máxima que sería de 240 ml de té de boldo hecho con 3 g de hojas de boldo como máximo.