Fumata blanca
Fumata blanca
Ya tenemos nuevo Papa: el estadounidense Robert Francis Prevost llevará el nombre de León XIV tras ser el elegido en un cónclave mucho más rápido de lo esperado en la Capilla Sixtina del Vaticano y tras solo cuatro votaciones. A las 18:09 horas de la tarde del 8 de mayo de 2025, la tradicional fumata blanca ha desvelado que los 133 cardenales con derecho a voto han llegado a un acuerdo en el mismo tiempo que se tardó en elegir a Benedicto XVI en 2005. Para seleccionar al papa Francisco en 2013 se necesitaron cinco rondas de votos.
El protodiácono de la Iglesia católica, Dominique François Joseph Mamberti, ha sido el encargado de anunciar el nombre del nuevo pontífice con la clásica fórmula en latín desde el balcón central de la basílica de San Pedro: «Annuntio vobis gaudium magnum: habemus Papam!» («¡Os anuncio una gran alegría: tenemos Papa!»). Antes, miles de fieles gritaban «¡viva el Papa!» entre aplausos desde la plaza, donde la Banda Pontificia ha interpretado los himnos de Italia y del Vaticano.
Tras elegir el hábito papal en la Sala de las Lágrimas, entre las tres tallas a su disposición, León XIV se presentará ante los fieles y les concederá la bendición Urbi et Orbi, como es tradicional en el solemne día de su elección. En latín, «para la ciudad [de Roma] y para el mundo», es una bendición papal dirigida a la ciudad de Roma y al mundo entero que se suele realizar en dos fechas –el Domingo de Pascua y el día de Navidad– desde el balcón central de la logia de la Bendición, en la fachada principal de la basílica de San Pedro.
El cardenal estadounidense Robert Francis Prevost ha sido elegido nuevo líder de la Iglesia católica romana, tomando el nombre de papa León XIV. Nacido en Chicago hace 69 años, de padres de origen francés y español, después de servir como misionero y arzobispo en Perú, Prevost presidió una de las reformas más revolucionarias del pontificado del Papa Francisco, añadiendo tres mujeres al bloque de votación que decide qué nominaciones de obispos enviar al Papa. «La paz sea con todos vosotros, hermanas y hermanos» han sido sus primeras palabras en la plaza De San Pedro.
El difunto Papa Francisco trajo al cardenal al Vaticano en 2023 para servir como el poderoso jefe de la oficina que examina las nominaciones de obispos de todo el mundo, uno de los trabajos más importantes de la Iglesia católica. Moderado, hispanohablante y conocido por su rápido ascenso en el seno de la Iglesia, se caracteriza por una visión progresista que le ha hecho ganarse el apoyo de varios sectores. Por ello, gozaba de un protagonismo de cara al cónclave que pocos cardenales tenían.
Sin embargo, un punto en su contra era su nacionalidad, ya que durante mucho tiempo ha existido un tabú contra un Papa estadounidense, dado el poder geopolítico que ya ejerce el país que preside Donald Trump en la esfera secular. Ahora, los expertos en asuntos del Vaticano vaticinan que podría ser la némesis del inquilino de la Casa Blanca.
La carrera eclesiástica de Prevost comenzó con el noviciado agustino de San Luis donde, en 1981, asumió sus votos. Luego llegarían los estudios en Teología y un viaje de juventud a Roma para estudiar Derecho Canónico. Tras ordenarse sacerdote en 1982, con 28 años, fue enseguida enviado al que se convertiría en su segundo país: Perú.
Tiene la nacionalidad peruana y vivió durante años en el país sudamericano, primero como misionero y luego como arzobispo. También fue elegido dos veces prior general de la orden religiosa de los agustinos, hasta que Francisco lo llevó a Roma en 2023.
Desde que llegó al Vaticano, Prevost ha mantenido un perfil público bajo, aunque ganando prestigio entre los cardenales que finalmente le han aupado al pontificado. A principios de 2025, el fallecido papa argentino volvió a mostrarle su estima nombrando a Prevost cardenal.
Su talante moderado le posiciona como puente entre las facciones conservadora y reformadora de la Iglesia y su gran conocimiento de América le ha valido el respaldo de los cardenales del sur y del norte del continente, muchos de los últimos críticos con Francisco.
TE RECOMENDAMOS