ANTE TODO PROTECCIÓN
ANTE TODO PROTECCIÓN
En la actualidad existe mucha concienciación sobre la importancia de la protección solar diaria sea un día de sol o esté nublado, pero hace 30 años esto no era así. Por estos motivos, muchas pieles maduras, a día de hoy, tienen una gran presencia de manchas en la piel producidas por la exposición excesiva al sol sin la protección adecuada. Unidas a estas manchas, está la predisposición de aparición de estas con la llegada de la menopausia, esto se traduce en una preocupación crucial para las mujeres.
El asesoramiento por parte de profesionales es también muy importante, ya que estos son los que van a detectar de qué tipo de mancha estamos hablando y de cómo tratarla. Además, pautarán cuál es la mejor rutina de cuidado de la piel, que este es otro de los puntos a tener en cuenta. ¿Cómo cuidar la piel madura para evitar la aparición de manchas? La dermatóloga Elena Martínez Lorenzo; la farmacéutica, titular de la Farmacia Avenida de América y experta en dermofarmacia, Belén Acero y Karla Pires, farmacéutica y responsable de calidad en Planet Skin explican las claves.
Existen diversas causas por las que se producen las manchas en las pieles maduras. La dermatóloga Elena Martínez Lorenzo explica que «suele ser una mezcla entre exposición solar crónica, quemaduras solares en la infancia y tendencia genética». La profesional destaca que «todo esto asociado al paso de los años suele ser el combo perfecto para que vayan apareciendo manchas con el paso de los años».
Profundiza sobre este tema la farmacéutica Belén Acero y explica que «la hiperpigmentación es uno de los problemas estéticos que más preocupan a los hombres y las mujeres». La profesional afirma que «más del 62% de la población posee manchas y desea eliminarlas. Las manchas aparecen por multitud de razones, entre las que se incluyen la exposición al sol en lugares donde han ocurrido procesos inflamatorios como el acné, envejecimiento, deficiencias nutricionales, desequilibrios hormonales, donde entra el embarazo y la menopausia, la genética y ciertos medicamentos». Eso sí, la experta matiza que «la radiación solar es (casi) siempre la gran culpable o, mejor dicho, no utilizar una protección solar de amplio espectro para prevenir las manchas y otros problemas cutáneos más graves».
El asesoramiento por parte del dermatólogo es muy importante. Por ello, explica la doctora Martínez Lorenzo, «lo primero es hacer un diagnóstico apropiado» y añade que «la clínica es fundamental, para ello una buena historia clínica que contenga tiempo de aparición, cómo han evolucionado con el tiempo y si se ha hecho tratamiento a lo largo del tiempo sobre esa mancha». Considera la profesional que «la exploración física es importante, sobre todo la dermatoscopia. Otras técnicas como la luz de Wood o la biopsia nos van a ayudar a hacer el diagnóstico diferencial entre algunos tipos de manchas».
Con la llegada del verano estamos aún más expuestos al sol, por este motivo, tenemos que prestar muchísima atención a nuestra rutina. Para la dermatóloga Elena Martínez Lorenzo es «fundamental protegerse del sol con cremas, gorros, sombreros o gafas, todo ello nos va a ayudar a que el sol no dañe nuestra piel». La profesional recomienda «evitar tomar el sol, sobre todo en las horas centrales del día, evitar exponerse al sol en las horas en las que nuestra sombra es más corta». Esto es porque «aquí es cuando el sol incide más en perpendicular y, por ello, cuando el sol es más dañino. Por otro lado, el uso de antioxidantes va a reducir el daño producido por el sol».
En el caso de Belén Acero, esta advierte que «hay que tener paciencia para despigmentar la piel y, por otro lado, se requiere de un riguroso cuidado de la piel y mucha constancia». Por esto, «la clave está en saber seleccionar los productos adecuados para cada tipo de piel y, por supuesto, no caer en la desesperación». Explica la farmacéutica que «los principios activos han evolucionado mucho y, en la actualidad, podemos decir que son mucho más eficaces». Eso sí, tiene en cuenta también que «la mayoría de las patologías relacionadas con la hiperpigmentación, como el melasma, son crónicas y que, si nos vuelve a dar el sol sin protección, lo más seguro es que vuelvan a salir».
¿Qué hacer con estas patologías crónicas? Afirma la farmacéutica que es fundamental el uso de «cosméticos despigmentantes, exfoliantes para dejar la piel lo más lisa y homogénea posible, adaptados a cada tipo de piel».
Hay activos que son aptos para incluir en la rutina antimanchas. Destaca la dermatóloga Elena Martínez Lorenzo que son fundamentales «los antioxidantes, protección solar y activos que inhiban la producción de la mancha como el ácido azelaico o el melasyl». La profesional recomienda «exfoliar la piel unos dos días a la semana con exfoliantes físicos y usar algún exfoliante químico como el ácido glicólico».
Por su parte, la farmacéutica Karla Pires considera que «los alfahidroxiácidos (AHA), como el ácido glicólico o el láctico, ayudan a renovar la piel eliminando células muertas. Este proceso no sólo mejora la textura, sino que también potencia la luminosidad y evita la acumulación de melanina que puede derivar en manchas». Advierte que «hay que usarlos con precaución y siempre combinarlos con protección solar».
Para la farmacéutica y responsable de calidad de Planet Skin, «el ácido tranexámico es un activo que, hasta hace poco, se usaba sobre todo en tratamientos médicos para controlar sangrados. Sin embargo, los estudios demostraron que tenía un potente efecto inhibidor de la melanina, lo que lo convierte en un activo clave para tratar el melasma y las manchas en la piel». La experta destaca que lo mejor es que «no sólo actúa en la superficie, sino que también reduce la inflamación y previene que las manchas vuelvan a aparecer. Por eso, estamos viendo que cada vez más marcas están apostando por incluirlo en sus fórmulas».
¿Es la exfoliación necesaria con las manchas? Destaca la doctora Martínez Lorenzo que «la exfoliación va a permitir que los tratamientos despigmentantes penetren mejor, además acelera la eliminación del pigmento superficial en manchas como el melasma leve o la hiperpigmentación post inflamatoria». En el caso de Belén Acero, considera que con el melasma «hay que tener cuidado». Esto es porque «puede incluir el uso de agentes despigmentantes tópicos como la hidroquinona, el ácido kójico y los retinoides, además de procedimientos dermatológicos como el láser y los peelings médicos». Concluye que «la fricción, la limpieza excesiva y la exfoliación repetitiva aumentan la aparición del melasma. Todas estas cosas deben evitarse».
La doctora Martínez Lorenzo concluye con otras recomendaciones como «protegerse del sol, asociar incluso protección solar oral o el uso de activos que ayuden a controlar las manchas como la niacinamida y el ácido azelaico».