NO TE PIERDAS

La reina Letizia rescata su traje gris de cuadros más elegante de Hugo Boss para la reunión con la Fundación Princesa de Girona

los pueblos con más encanto de españa

Frigiliana, el pueblo blanco más espectacular de Málaga con el que comenzó el turismo rural

Frigiliana, en Málaga, es uno de los pueblos con más encanto de España gracias a sus calles empedradas llenas de flores, sus casas de blanco encalado y su imponente ubicación en la región de la Axarquía.

Ver fotos

Pincha en la foto de Frigiliana (Málaga) para ver cuáles son los pueblos más bonitos y con más encanto de España. instagram @ayto_frigiliana

Enclavado en la comarca de la Axarquía, en el corazón del Parque Natural de las Sierras de Almijara, Tejera y Alhama, rodeado de aguacateros, mangos, cañas de azúcar y olivos, se erige, blanco y radiante, Frigiliana. Este pueblo que mira al Mediterráneo desde dentro (está a escasos minutos del mar), con sus casas encaladas, sus buganvillas y geranios, y sus empinadas calles empedradas demuestra que Málaga es mucho más que el lujo y la ostentación de la Costa del Sol. Y que la Andalucía interior, la más desconocida y auténtica, merece una escapada esta primavera.

La herencia morisca se refleja en su sinuoso trazado, en sus calles empedradas, en sus adarves, en un casco histórico pintado de blanco y repleto de casas bajas encaladas con sus puertas azul mar (o cielo) y sus balcones rebosantes de flores, típicas de la arquitectura andalusí. Gracias, todo, a que hace 30 años Frigiliana ganó el premio de embellecimiento de los pueblos de España, en una época en la que el turismo rural se reducía a irse al pueblo con los abuelos durante el verano. En Frigiliana empezó el boom de las escapadas de interior, y sigue mereciendo ser una de nuestras primeras opciones cuando de viajar por España se trata.

Qué ver y qué hacer en Frigiliana

Con un clima propio casi tropical, con inviernos templados e intensos veranos, es la primavera el mejor momento para visitar Frigiliana. Sus patios y sus flores están en plena efervescencia de color, contrastando con intensos fuscias, azules, rojos y verdes las fachadas blanquísimas, huele a fruta y aceituna, y la tradición y el folclore nos transportan a otros tiempos en su Semana Santa o en las Cruces de Mayo.

Los que buscan la parte más artística y monumental en su escapada, también la encontrarán en Frigiliana, donde sigue funcionando la única fábrica de miel de caña que queda en Europa (de estilo renacentista) y donde aún se conservan los restos de un castillo árabe y permanecen casi intactas construcciones del siglo XVII y XVII (el Palacio de los Condes de Frigiliana, la Casa del Apero, la Fuente Vieja, los Reales Pósitos, la iglesia de San Antonio) o la plaza de las Tres Culturas. Además, están el museo arqueológico (con restos neolíticos), el jardín botánico y unas vistas que dejan sin aliento: aunque se trata de un pueblo de interior, esta villa de unos 3.000 habitantes se erige sobre un monte a 300 metros sobre el nivel del mar y el Mediterráneo azul se funde con el cielo despejado a solo seis kilómetros.

Dónde comer y dormir en Frigiliana

La gastronomía más tradicional de Málaga se saborea también en Frigiliana (el gazpachuelo, la porra antequerana y el ajoblanco, las berenjenas con miel de caña, los pescaítos, los espetos de sardina) pero tienen sus propios platos típicos, del choto frito en salsa de almendras, al potaje de coles o hinojo, las tortillas de huevo y harina mojados en miel de caña típicas de Semana Santa, las migas con pescado fresco (o chorizo y morcilla) que se comen los días de lluvia o dulces como la arropía y las marcochas. Todo, aliñado con su aceite de oliva y regado con sus moscateles de la tierra. ¿Dónde probar estas delicias no aptas para estar a dieta? En El Adarve, El Jardín, La domadora y el león, El lagar o La bodeguilla.

Y para dormir, nada mejor que La Posada Morisca, un encantador hotel rural de inspiración árabe con vistas impresionantes organizado en pequeños cortijos que mezclan estilo andalusí con notas rústicas y provenzales y que dispone de infinity pool y un restaurante con terraza imponente.