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Masturbarse es un pequeño placer de la vida como pocos. Casi tanto como comer o dormir, seamos sinceras. ¿Pero te has preguntado alguna vez qué ocurriría si dejases de hacerlo? Nos hemos puesto a investigar qué dicen los estudios científicos sobre este tema. Ya te adelantamos que la masturbarción (hablaremos de la femenina en este artículo) tiene múltiples beneficios. Y si dejas de hacerlo, prescindirás de ellos. ¿Qué le ourriría a tu cuerpo en el caso de que dejases de masturbarte?
Masturbarte antes de irte a dormir puede actuar como un buen somnífero. Ten en cuenta que durante la masturbación nuestro cerebro libera varias sustancias, entre ellas endorfinas y otros neurotransmisores como la dopamina, encargada de regular el sueño. Estas sustancias nos proporcionan un sentimiento de saciedad y bienestar que hace que nos sintamos más somnolientas. ¿Por íbamos a renunciar entonces a este método efectivo que nos ayuda a dormir?
Como lo lees. Masturbarse ayuda a que se abra el cuello uterino, liberando mucosidad y fluidos cervicales, que es donde residen las bacterias. Esta liberación ocasional nos ayuda a librarnos de infecciones urinarias.
También hay otros remedios para prevenir una infección de orina, como tomar arándonos rojos y, por supuesto, mantener una buena higiene íntima. Añádele a este combo una masturbación ocasional y estarás cuidando de tu salud.
Evidentemente, el estrés se puede producir por múltiples factores ajenos, pero una manera de reducirlo es (adivina...) masturbándose. Así lo han comprobado diversos estudios, al observar el efecto que tiene la dopamina en nuestro cuerpo. Ya hemos visto que puede ayudarnos a conciliar el sueño, pero este neurotransmisor que se libera cuando alcanzamos el orgasmo a través de la masturbación, también tiene la capacidad de relajarnos y aportarnos una gran sensación de bienestar.
Si no sabes qué te gusta en la cama, ¿cómo vas a alcanzar fácilmente el orgasmo? Masturbarse en una técnica recomendada por los sexólogos para mejorar las relaciones sexuales de pareja. Nos hace conocer nuestras zonas erógenas y despierta fantasías, lo que ayuda después a alcanzar un orgasmo de calidad.
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¡Así es! La masturbación también ayuda a reducir los dolores que sufrimos durante la regla. Las sustancias químicas que nuestro cuerpo libera con el orgasmo, actúan como un analgésico, haciendo que la zona genital se desinflame y el dolor disminuya.
Ahora que sabes todo lo que le podría ocurrir a tu cuerpo si dejaras de masturbarte... ¿estás dispuesta a correr el riesgo?
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