actualidad

La 'dolce vita' en yate de Selena Gomez sin Justin Bieber

Selena Gomez no sale de una para entrar en otra. Después de la complicada operación, ahora se recupera de su ruptura con Bieber.

¿Has pillado el truco de las famosas para la lluvia? ¡Todos los looks en la galería!

Ver fotos

¿Has pillado el truco de las famosas para la lluvia? ¡Todos los looks en la galería! getty
Elena de los Ríos

Selena Gomez ha querido tomar distancia de su ruptura con Justin Bieber y ha puesto nada menos que 12.000 kilómetros por medio: se ha ido a Australia. La cantante y sus amigas se pasearon en yate por las inmediaciones marítimas de Sydney, tomando el sol tranquilamente. A ella se la veía estupenda con su biquini bicolor, rojo y negro, y sus victoriosas cicatrices del transplante renal.

En las últimas semanas, su amiga y donante de riñón Francia Raisa ha contado las complicaciones que Gomez enfrentó durante la cirugía, y que tienen que ver con la cicatriz que tiene en su pierna. “Unas horas después de la operación de transplante, me desperté y vi que tenía un mensaje de Selena que me decía que estaba asustada, porque se le había roto una arteria que conectaba con el nuevo riñón. Tuvieron que volver a meterla en el quirófano para reconstruirla con una vena que sacaron de su pierna. Podría haber muerto”.

Por suerte, todo salió bien y la misma Selena ha contado como ha ido mejorando su salud desde el transplante. “Llegó un momento en que era cuestión de vida y muerte. La noticia fue difícil de digerir, pero en cuanto me trasplantaron el nuevo riñón, desapareció mi artritis, el porcentaje de que reapareciera el lupus se quedó entre un 3 y un 5% y mejoró mi presión sanguínea y mi energía. La vida es mucho mejor ahora”. ¿Quién se acuerda de Justin?

HORÓSCOPO

HORÓSCOPO

Sagitario

Como signo de Fuego, los Sagitario son honestos, optimistas, ingeniosos, independientes y muy avetureros. Disfrutan al máximo de los viajes y de la vida al aire libre. Son deportistas por naturaleza y no les falla nunca la energía. Aunque a veces llevan su autonomía demasiado lejos y acaban resultando incosistentes, incrontrolables y un poco egoístas.