Cuatro trucos para introducir más ejercicios de cardio en tu rutina del gimnasio

Veamos como conseguirlo:

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   Reduce progresivamente el tiempo de descanso entre las series. Por ejemplo, si entre las primeras flexiones y las segundas descansas 20 segundos, entre las segundas y las terceras solo descansa 15 segundos, y en las terceras repeticiones reduce el tiempo de descanso a 10 segundos. Al tiempo que tu cuerpo tiene menos tiempo para recuperarse se carga al sistema aeróbico y es una buena estrategia para quemar más grasas sin tener que incrementar el peso que levantas en las repeticiones.

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   Carga peso en las dos manos. Es mejor cargar peso en ambos lados del cuerpo cuando se trata de hacer extensiones o sentadillas. Hacer movimientos bilaterales con los miembros superiores al mismo tiempo incrementa la frecuencia cardíaca mucho más que si nos concentramos en una sola parte del cuerpo.

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   Salta, salta. Los movimientos explosivos tales como sentadillas con saltos o zancadas con saltos son muy efectivos para fortalecer al corazón, y al mismo tiempo para construir músculo. Para maximixar el efecto de estos movimientos haz como mínimo 50 repeticiones por cada ejercicio. Esto mantendrá tu frecuencia cardíaca elevada durante 50 minutos.

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   Coge pesos más pequeños y aumenta las repeticiones. En un entrenamiento tradicional de fuerza se coge un peso medio alto con el que solo puedes hacer entre repeticiones durante 45 segundos. Pero si quieres elevar la frecuencia cardíaca la estrategia debe ser la contraria, coger pesos más livianos y ejercitarse durante dos o tres minutos sin parar. Créenos, así quemarás más grasas.