EN EL CASTILLO DE WINDSOR
EN EL CASTILLO DE WINDSOR
La segunda visita de Estado de Donald y Melania Trump al Reino Unido redobla esta semana la exigencia de la agenda oficial para Kate Middleton, quien ayer asistió de luto riguroso al funeral de la duquesa de Kent. Hace tiempo que la princesa de Gales se incorporó a sus labores de representación, pero siempre sin sobrecargarse de obligaciones. Esta vez no podrá disfrutar de un descanso entre compromiso y compromiso, con la dificultad añadida de que la reina Camilla no está, parece, en plena forma.
Los reyes Carlos III y Camilla son, sobre el papel, los anfitriones de los Trump, que aterrizan en Londres con la intención de disfrutar de la pompa y el boato de la monarquía británica. Decimos sobre el papel porque la reina Camilla no pudo asistir ayer al funeral de la duquesa de Kent por una sinusitis, con lo que necesitará de la asistencia de Kate Middleton para que la agenda del Presidente de los Estados Unidos y la primera dama llegue a buen término.
Con todo, no es la reina Camilla la que se llevará los focos de este viaje de Estado, sino la princesa de Gales: por fin vamos a tener la primera foto de Kate Middleton y Melania Trump juntas y comprobar, al menos a través de las imágenes, el tipo de química que puede establecerse entre la futura reina del Reino Unido y la primera dama de los Estados Unidos. De momento, la esposa de Donald Trump ya ha tenido un gesto con el país anfitrión.
Sintomáticamente, los Trump decidieron viajar a Londres para llegar 24 horas antes del comienzo de su agenda oficial, buscando probablemente unas horas de descanso que les permitan resistir el ritmo de reuniones y recepciones que impone una visita de Estado. En las tradicionales fotografías de camino al helicóptero militar, pudimos ver a una Melania Trump abrigada con una clásica gabardina de la firma británica Burberry. En edición exclusiva, valorada alrededor de 4.000 euros.
Los Trump ya están alojados en el castillo de Windsor, sin haber saludado si quiera a los reyes Carlos y Camilla a su llegada, debido a las altas horas: aterrizaron alrededor de las diez y media de la noche en el aeropuerto de Stansted. Hoy serán recibidos oficialmente por los monarcas y los príncipes de Gales, antes de almorzar en el comedor de estado. A continuación, las tres parejas caminarán hasta la Capilla de San Jorge para depositar una corona floral en la tumba de la reina Isabel II y disfrutarán de una actuación del coro.
Incluimos a la reina Camilla en la agenda oficial de esta segunda visita de Estado de los Trump a Reino Unido, aunque no sabemos si su sinusitis le permitirá o no cumplir con cada uno de los eventos. El plato fuerte, en todo caso, es el banquete de Estado que se celebrará esta noche en un castillo de Windsor fortificado: el dispositivo de seguridad destinado a proteger a Donald y Melania Trump cuenta con miles de agentes, vehículos y drones, y ha cortado al tráfico no solo en parte del pueblo de Windsor, sino también en su espacio aéreo.
Será interesante contemplar el despliegue indumentario que realizan la reina Camilla y Kate Middleton, responsables de encarnar la pompa histórica que tanto impresiona a Donald y Melania Trump. El Presidente de los Estados Unidos y la primera dama cuentan, de todos modos, con su propia e impactante corte: también cenarán en Windsor los presidentes y consejeros delegados de las tres empresa más valiosa en Bolsa del mundo: Jensen Huang (Nvidia), Satya Nadella (Microsoft) y Tim Cook (Apple). Y Sam Altman, líder mundial en Inteligencia Artificial.
El duelo entre Kate y Melania será, seguramente, imposible de dilucidar en el banquete de Estado, pues el lujo silencioso que suele desplegar la primera dama estadounidense es incomparable con la suntuosidad indumentaria, tiara incluida, de la princesa de Gales. Por suerte, ambas tienen otra posibilidad de rivalizar el jueves, en la primera cita a solas que disfrutarán dos de las mujeres más influyentes (indirectamente, se entiende) del planeta. Tienen previsto dar un paseo por Frogmore Gardens, animadas por responsables del programa de las Ardillas Scouts.
Antes de este paseo, muy alineado con el interés de Kate Middleton por las actividades al aire libre y la naturaleza, figura una cita entre Melania Trump y la reina Camilla. Se trata de una visita a una de las exposiciones abiertas al público en Windsor, dedicada a la casita de muñecas de la reina María de Teck. ¿Podrá realizarla la reina Camilla, o tendrá que delegar en Kate? Lo tendremos que comprobar sobre la marcha. En todo caso, esta casa de muñecas merece ser vista: contiene piezas de más 1.500 de los mejores artistas, artesanos y fabricantes de principios del siglo XX.