No ha sido una semana tranquila para la imagen pública de Kate Middleton. Acostumbrada a apariciones en las que roza la perfección, incluso después de haber superado el cáncer que le sacó de sus habituales obligaciones, la princesa se vio envuelta en una inesperada polémica con su melena.
Más rubia, más larga y con un volumen extra en la raíz que dio rienda suelta a miles de comentarios: «¿es una peluca?», «¿se ha puesto extensiones?», «¿qué se ha hecho Kate Middleton en el pelo?», «¿es un fallo en el peinado?». Había algo diferente en ella y nadie sabe ni sabrá el qué.
Lo que sí sabemos es que ha vuelto a reaparecer y de nuevo, no nos ha dejado indiferentes. Relajada, sonriente y participativa, la princesa de Gales asistió este sábado al partido de la Copa Mundial de Rugby Femenina 2025 que disputaban Inglaterra y Australia en el estadio Brighton & Hove Albion.
Su presencia no es casual, Kate ejerce desde 2022 como patrona de la Rugby Football Union y la Rugby Football League, las dos organizaciones más importantes de este deporte en su país. Un cargo que asumió en relevó del príncipe Harry tras su salida de la familia real.
Situada en el palco de honor, Kate Middleton ha presenciado la competeción con un look muy elegante con mensaje: una etiqueta de luto moderado por protocolo tras la muerte de la duquesa de Kent a los 98 años, uno de los miembros más iluestres de la Familia Real británica.
Así, para la ocasión, Kate Middleton ha sacado de su armario un básico que pocas veces le hemos visto puesto, ya que su imagen suele estar construída entorno a otros colores más llamativos para ocasiones especiales, como el blanco impoluto, el azul klein favorito de las royals o incluso en morado.
Se trata de un traje negro de dos piezas, compuesto por una blazer de hombreras muy marcadas y unos pantalones estilizadores con la cintura ceñida, el tiro alto, y el tejido fluido. Para dar un toque de luz, la princesa añadió una blusa blanca con volantes en el cuello que le sienta de maravilla.
En cuanto a la melena, parece que Kate ha rectificado rápidamente su color a través de algún tipo de matiz, porque hemos podido verla de nuevo con su habitual tono castaño claro con reflejos dorados.
Y en cuanto al peinado, su elección fue la de zanjar cualquier tipo de comentario: un peinado semirecogido espectacular con el que confirma que se trata de su melena natural al dejar al descubierto la raíz por completo.