La mejor música para el running

Irene Rivas Publicado · 13 de junio de 2021, 16:11 h

Practicar deporte mientras escuchas música es beneficioso. No solo porque permite que tu mente vuele y se distraiga del cansancio o las molestias sino porque, en el caso del running por ejemplo, salvo que lo tuyo sea el runfulness, te ayuda a aislarte de tus pisadas y tu respiración, por lo que potencia la resistencia.

Ahora bien, con la variedad de estilos musicales que hay, ¿cómo escoger el que mejor nos va a cada uno a la hora de realizar una carrera? Hay varios consejos que pueden ayudarte: por un lado busca esas playlists que te ponen de buen rollo o un buen listado de canciones llenas de girl power que saquen toda esa fuerza y nervio que tienes dentro de ti.

O, como hace mucha gente, prueba distintos estilos hasta que des con el que (sea o no el que más te guste) te ayude por su base rítmica a mantener la cadencia durante la carrera con la que tú te sientes cómoda. Hay quien, por ejemplo (y sin ser oyente de ese tipo de música) se prepara una playlist entera de reguetón porque ha descubierto que corre de maravilla con el patrón básico de este estilo.

Si ya has probado a correr alguna vez y/o tienes un objetivo definido pero no acabas de dar con la música, tenemos la solución. Elige la distancia que vas a correr en tu entrenamiento (o en la carrera) y calcula el ritmo al que corres. Para orientarte: si eres principiante y vas a hacer 5 kilómetros, un buen ritmo es correrlos en media hora, lo que equivale correr a 6 minutos el kilómetro.

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Con ese cálculo, entra en la página web jog.fm En la columna de la izquierda, bajando un poco, verás que hay una casilla donde pone “pace”. Escribe ahí el ritmo de carrera que piensas llevar (6 minutos en este caso de ejemplo que hemos visto) y te dará el resultado en BPM al que correrás (153) y un listado de playlists que se adecúan. ¿No te parece genial? ¡Esperamos que lo disfrutes!

Y si no acaba de convencerte siempre puedes hacerte tú una lista de forma manual e ir introduciendo las canciones en función del momento de carrera en el que previsiblemente te encontrarás: las primeras para coger el ritmo, las siguientes para mantener esa cadencia y las últimas para insuflar ánimos y tener un subidón de energía con temazos que consiguen hacerte volar. ¡A por todas!