La curiosa infancia de Stella del Carmen entre Málaga y Hollywood: alfombras rojas, tortilla de patata y el Gran Prix

Jorge C. Parcero Publicado · 25 de septiembre de 2025, 08:07 h

El 24 de septiembre de 1996 llegaba al mundo en el Hospital Costa del Sol de Marbella una niña llamada Stella del Carmen, la única hija del matrimonio de actores que formaron Antonio Banderas y Melanie Griffith. Felipe González y el entonces alcalde de Marbella, Jesús Gil, enviaban sendos ramos de flores a la actriz tras el parto. Hoy, a sus 29 años recién cumplidos, Stella es toda una mujer que ha crecido en una familia bilingüe de padres famosos y que ha procurado permanecer en gran medida alejada del foco mediático.

Aunque pasó sus primeras semanas de vida en La Gaviota, la ahora demolida casa de Antonio Banderas en la ciudad malagueña que había pertenecido a Encarna Sánchez, Stella creció en Estados Unidos. Instalada en Los Ángeles junto a sus padres, estudió en el colegio Wagon Wheel School de la ciudad californiana. Allí sería donde conoció a su primer amor, Alex Gruszynski, con el que el próximo 18 de octubre se dará el 'sí, quiero' en una ceremonia que tendrá lugar en un exclusivo enclave vallisoletano.

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Antonio y Melanie se separaron cuando Stella todavía no había cumplido los 18. Sin embargo, tras la firma del divorcio, los dos reiteraron en multitud de ocasiones la gran relación existente entre ambos, sobre todo por el bien de su hija. Hoy, aquella joven que protagonizó junto a su madre su primera campaña publicitaria cuando era tan solo un bebé y que creció entre fotógrafos y alfombras rojas, es una mujer con las ideas muy claras y con una fuerte conexión con el país donde nació.

Coincidiendo con el confinamiento por el coronavirus de 2020, Stella del Carmen se hizo la promesa de recuperar sus raíces españolas, reflexionando sobre cómo había sido criarse entre dos culturas distintas y hablando dos idiomas diferentes. Lo hizo en su debut como columnista en la revista Vanity Fair un artículo que tituló: Cómo crecer en una familia bilingüe.

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Tras hablar del origen de su segundo nombre, que su padre le puso en honor a la Virgen del Carmen y que «define mi ascendencia y mi conexión como mujer española», la joven recordaba con nostalgia sus momentos favoritos de sus viajes a España. «Cuando decido hacer una tortilla de patatas en mi casa de Los Ángeles o cuando uso FaceTime con mi padre y puedo ver un trocito de Marbella de fondo de pantalla de mi móvil, recuerdo mi primera infancia en la playa, con mi familia, comiendo bocadillos de Nutella y viendo el Grand Prix del verano».

Rememorando sus experiencias en la Semana Santa malagueña y sus paseos por la ciudad junto a su tía, «el chocolate con churros y las cenas de tres horas», al final del artículo, Stella del Carmen terminaba describiendo a los españoles como «fuertes y profundamente apasionados». Para ella, sus compatriotas «valoran a su familia por encima de todo y saben reírse de cualquier cosa».

Cuando llegó el momento de ir a la universidad, la hija de Antonio Banderas y Melanie Griffith decidió instalarse en Nueva York para estudiar Literatura y Arte. Alejándose de lo que ahora se conoce como nepo babies, entonces Stella del Carmen parecía muy decidida a no seguir los pasos en la actuación de sus padres ni de su hermana, Dakota Johnson.

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Pero posteriormente cambiaba de opinión sobre su futuro profesional, tras graduarse en Estudios Narrativos en la Universidad del Sur de California. «Mi hija Stella está ahora estudiando Arte Dramático. Nos ha sorprendido a todos porque ella no quería estar delante de las cámaras y de repente quiere dar ese salto», desvela a la revista ¡Hola! Antonio Banderas.

Ahora, en un nuevo giro de guion, la joven parece decidida a hacer carrera detrás de las cámaras. Para aprenderlo todo del oficio y para seguir su plan de reconectar con sus raíces, recientemente se instalaba junto a su padre en Málaga. Con él se formó como ayudante de dirección en su Teatro del Soho, trabajando en su musical Company. A la espera de saber qué le deparará el futuro, ella misma se presenta en su web como una «narradora multimedia cuyos escritos y películas se basan en la nostalgia, el realismo mágico y los mundos oníricos surrealistas».

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