DOBLE JUEGO
DOBLE JUEGO
A lo largo de la temporada otoño-invierno 2025, se dibuja en las pasarelas un juego de opuestos: por un lado, los grandes volúmenes en abrigos y chaquetas; por otro, las siluetas entalladas que reivindican las formas femeninas en faldas, vestidos y blazers. Este contraste se convierte en un diálogo dramático entre el exceso y la precisión, entre la envoltura protectora y la figura insinuada.
En un momento en que el abrigo recupera su protagonismo en el armario como pieza protagonista de nuestros looks, la tendencia de lujo determina una dualidad estética que juega con opuestos complementarios. Y en ese juego no compiten, sino que conviven, estructuras volumétricas en el exterior con las sinuosas formas del cuerpo femenino que envuelven,
Los grandes volúmenes se manifiestan con autoridad en los abrigos XXL, en capas esculturales y en mangas generosas como las de MaxMara y SPORTMAX, que presentaron prendas de outerwear de hechuras dramáticas con largo sobredimensionado y proporciones amplificadas, marcando el abrigo como protagonista absoluto de cualquier look.
En estos diseños, la tela fluye con peso y cada pliegue se convierte en gesto monocromático: se impone la idea de que el abrigo es escultura que abraza el cuerpo, y no solo unaq prenda funcional. Estas propuestas remiten al espíritu couture, pero con una sensibilidad urbana que apuesta porque un abrigo no debe impedir la postura, sino realzarla.
Frente a ese protagonismo expansivo, las siluetas interiores adoptan el enfoque contrario para redefinir a través de las curvas femeninas la sensualidad contemporánea: cinturones ceñidos, cortes princesa, líneas entalladas que exaltan la forma natural como hacen Cavalli, Soeur, Givenchy, Versace o Issey Miyake con detalles peplums, cuerpos ajustados y faldas lápiz que conviven con vestidos encorsetados.
Esta elegante tensión entre volumen y estructura se hace aún más explícita en la práctica del layering, una de las tendencias dominantes este otoño-invierno 2025, en la que la prenda exterior dialoga con la interior, permitiendo que la silueta marcada emerja en un contrapunto dramático. Por eso, no se duda en combinar abrigos generosos sobre vestido ultraceñidos o faldas de cintura marcada; o envolver bajo una gran capa trajes sastre bien entallados.
En la paleta de tejidos y texturas, el contraste se expande: lanas bouclé, pelos ultrasuaves, dobles faz y materiales drapeados en los abrigos tensan su capacidad envolvente. Mientras tanto, las piezas interiores recurren al tejidos que ofrecen cuerpo y definición. Además, en este juego de opuestos, los contrastes de acabados brillo mate y satinado enfatizan el resultado final. Mientras el abrigo otorga textura, la pieza interna impone contorno.
CRÉDITOS:
Modelo: Roos Abels (Uno Models).
Maquillaje y peluquería: Jordi Fontanals (Ana Prado).
Asistente de fotografía: Dani Caparrós.
Asistentes de estilismo: Liliana Palop y Silvia de Ruiz.